Bolivia enfrenta desafíos en el acceso a energía moderna, especialmente en zonas remotas, debido a la falta de capacidad técnica en energías renovables. A pesar del potencial en este campo, el país depende en gran medida de combustibles fósiles. El gobierno propuso el Plan de Expansión Energética 2025 para integrar nuevas infraestructuras y lograr acceso universal a la electricidad en áreas rurales. Aunque Bolivia posee recursos abundantes en energía solar, biomasa, geotérmica y eólica, se estima que solo el 9% de su energía provendrá de fuentes renovables para 2025. La Universidad Mayor de San Simón lidera esfuerzos para desarrollar capacidades en energía mediante el Centro Universitario de Investigaciones en Energías (CUIE), en colaboración con otras instituciones. Esta iniciativa busca aprovechar el potencial de Cochabamba como polo energético y suplir la limitada infraestructura de investigación en el país. Se requieren soluciones basadas en ciencia, tecnología e innovación para garantizar el acceso a energía limpia para todos y avanzar en el desarrollo sostenible de Bolivia.